sábado, 21 de maio de 2011

LA IZQUIERDA ANTE EL ABISMO DE LA DEMOCRACIA

[Universidad Nomada Info]

LA IZQUIERDA ANTE EL ABISMO DE LA DEMOCRACIA

Entre el 11-M de 2004 y el 15-M de 2011


Marcelo Expósito, Tomás Herreros y Emmanuel Rodriguez (Universidad Nómada)

Madrid, jueves 19 de mayo de 2011 http://universidadnomada.net


El 11 de marzo de 2004, diez explosiones simultáneas reventaron cuatro trenes en Madrid, segando la vida de casi 200 personas, hiriendo cerca de 2000 y sembrando el espanto. En las horas siguientes, el gobierno del Partido Popular, presidido por José María Aznar, organizó una ceremonia de la confusión con la finalidad de capitalizar políticamente el dolor. Simultáneamente, los teléfonos móviles empezaron a recibir mensajes de texto: encontrémonos en la calle. Riadas de personas tomamos los espacios públicos, en manifestaciones y concentraciones difusas, espontáneas, exigiendo conocer la verdad. Era el sábado 13 de marzo, jornada de reflexión electoral. Al día siguiente, los votos mayoritarios dieron una inopinada victoria al candidato del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero. Dicho con claridad: Zapatero llega al gobierno de España aupado por un movimiento social. El nuevo presidente prometió en público: «No os fallaré». Retengamos por un momento esta imagen.


Domingo, 15 de mayo de 2011. La manifestación convocada por redes sociales en Internet desborda las expectativas: decenas de miles de personas se reúnen en sesenta ciudades españolas bajo el lema común «Democracia real, ¡ya!», que arrastra tras de sí toda una constelación de enunciados: «No somos mercancía en manos de políticos y banqueros», «No nos representan». Las manifestaciones generan tal euforia que centenares de personas ocupan las plazas centrales de sus respectivas ciudades, comenzando por la toma más emblemática, la Puerta del Sol de Madrid. A pocas horas de la celebración de elecciones municipales y autonómicas en toda España, el llamado Movimiento del 15-M ha restituido el sentido a la palabra «política» en mitad de una campaña electoral deplorable. Dicho con claridad: todo hace prever que el presidente Zapatero se marchará del gobierno de España envuelto por un movimiento social, que comenzó siendo de indignación por su gestión de la crisis económica y ahora es un clamor por la refundación democrática.


Proponemos un ejercicio de montaje sencillo: poner juntas esas dos imágenes, las de sendos movimientos sociales apartidistas y en su origen espontáneos, que marcan la entrada y la salida de un presidente en el que se depositaron esperanzas progresistas. ¿Qué ha sucedido entre una y otra imagen? ¿Qué sentido produce su contraste? ¿Cómo se ha producido el tránsito entre aquel repunte de confianza en la participación electoral para el cambio y la furiosa desafección actual?


La explicación se encuentra en el hecho de que el presidente Zapatero ha dilapidado una oportunidad histórica: las condiciones en que fue elegido abrían la posibilidad de un ejercicio renovado de la política que tuviera en cuenta la potencia de una sociedad organizada. Se empeñó, por contra, en un republicanismo cívico cuyo progresismo no alcanza a ver en los ciudadanos algo más que singulares votantes y depositarios de derechos otorgados desde arriba hacia abajo. Eso le impidió a comprender la situación delicada de unas sociedades donde el sistema clásico de representación política y de delegación de la soberanía popular mediante el mecanismo del voto se encuentran en una crisis irreversible. De haber alcanzado a entender que la actual tensión compleja entre poderes y contrapoderes sociales fue la condición misma de su llegada al poder, acaso hubiera enfrentado la crisis económica —que ha marcado la inflexión final de su gobierno— de una manera sustancialmente diferente a como lo ha hecho, negociando con los poderes económicos y suprainstitucionales unas indeseadas políticas de ajuste —que nos hipotecan el futuro—, a la espera de volver la mirada a sus electores en el último minuto, jugándose la carta de la confianza y el miedo a la derecha. Aquellos junto a los que Zapatero no ha sabido gobernar: los contrapoderes sociales, la capacidad de agitación democrática que la sociedad siempre contiene en latencia, han vuelto a tomar cuerpo para decir: ¡ya basta!


Entre una y otra imagen (2004-2011), siete años en los que la calle ha sido agitada por una derecha que ha deducido el colapso de la representación democrática y lo aprovecha con absoluto descaro: moviéndose como pez en el agua de la corrupción y la mentira, atizando a la población en contra de las mismas instituciones políticas en las que esa derecha medra para favorecer a los sectores con más poder y riqueza, manipulando el fundado descontento social, promoviendo la guerra civil entre las capas medias y las menos favorecidas. Por su parte, la izquierda adopta conceptos como ajuste, reforma o austeridad con el fin de volver a la «normalidad» económica. Pero hemos constatado que la crisis es ante todo crisis de la política tal y como la conocemos.


En esta crisis, la izquierda partidista tiene una responsabilidad inexcusable, por ser incapaz de concebir mecanismos efectivos de distribución de la renta y de invención de nuevos derechos sociales. Los gobiernos de centro-izquierda de Cataluña, Galicia o Baleares, y de otras grandes ciudades, ni han reinventado las formas democráticas, ni la relación del Estado con el cuerpo social, ni emprendido políticas diferentes a las prescritas en los manuales de administración y gerencia territorial.


Es en este marco donde se valida el Movimiento del 15-M: no es tiempo ya de mendigar confianzas ni de plantear promesas. Solo una apuesta ofensiva, que invente otra ética, otra política más allá de la nostalgia y la resignación, podría hacer entrar a la izquierda en otro ciclo histórico. Como no podía ser de otra manera, la refundación de la política democrática necesita como sostén la estimulación de un nuevo ciclo de luchas y conquistas sociales. Luchas y movilizaciones de los pobres y de los nuevos ciudadanos. Las temáticas abiertas a la movilización urbana no necesitan ser ficcionalizadas: están señaladas en los enunciados y los problemas ya presentes en la agenda de los movimientos y las reivindicaciones ciudadanas. El Manifiesto del Movimiento del 15-M lo afirma bien claro: «Las prioridades de toda sociedad avanzada han de ser la igualdad, el progreso, la solidaridad, el libre acceso a la cultura, la sostenibilidad ecológica y el desarrollo, el bienestar y la felicidad de las personas».


Una «Carta de los Nuevos Derechos»podría ser una de las opciones para reprogramar el viejo Estado de Bienestar. Se trataría de un proyecto político y económico insoslayable para cualquier partido que se reclame de izquierdas. Y sin embargo, no sería la fórmula para que los partidos de izquierda «representen» a la ciudadanía. La ciudadanía se constituye hoy como tendencia a la autorrepresentación. Migrantes, mujeres, personas afectadas por las hipotecas, por la destrucción del medio o por la degradación de los servicios públicos, comunidades agrupadas en torno a formas de vida singulares, redes sociales y un largo etcétera de agregaciones emergentes han encontrado formas de hablar por sí mismas, sin las formas anquilosadas de mediación por parte de los aparatos institucionales o representativos.


Todo apunta a que la izquierda partidista estará obligada a atravesar, no sólo en España, sino en el conjunto de Europa, una larga travesía del desierto. Es hora de que asuma la obligación de ensayar, en un futuro próximo, planteamientos nuevos que sólo pueden pasar por la aceptación de los límites a su representatividad y por la cooperación con los movimientos y las formas de agregación que crecen en las nuevas texturas urbanas. El acceso a la vivienda, el derecho a la salud y el cuidado, el reconocimiento de los comunes, el derecho al estudio o a la movilidad resuenan como un clamor subterráneo de los nuevos tiempos, que exige ser escuchado porque se hace realidad en el ejercicio cotidiano de las nuevas formas de habitar la ciudad. Se requiere, para refundar la izquierda institucional, futuros gobiernos que, en vez de plegarse a los poderes económicos y extrademocráticos, se pongan al servicio de las urgencias que señalan los nuevos movimientos sociales.

terça-feira, 1 de fevereiro de 2011

Hoje Battisti, amanhã tu!

Um grupo de cantores, entre os muito conhecidos na música portuguesa, juntou-se para interpretar esta canção de apoio à não extradição de Cesare Battisti. Pela Comissão de Apoio a Cesare Battisti (Portugal) (Passa Palavra)

Veja aqui o “video-clip” desta canção - com letra de Manuela de Freitas e José Mário Branco, e música de José Mário Branco - com a qual se pretende chamar a atenção para o caso de Cesare Battisti, preso no Brasil há quase 4 anos e ameaçado pelo Supremo Tribunal Federal de ser entregue ao governo italiano.

"HOJE BATTISTI, AMANHÃ TU" from Passa Palavra on Vimeo.



---

visite: cesarelivre.org

quinta-feira, 20 de janeiro de 2011

Uma carta de Cesare Battisti

Uma carta de Cesare Battisti: A história não se julga nos tribunais, ela será sempre

Caros companheiros(as), há meia hora, nesta terça, antes da visita dos companheiros decidi escrever um recado para todos vocês que participam dessa luta em meu favor. Resultado: pouco tempo para escrever algo vigoroso; cabeça cheia de insultos grifados de uma cela a outra; e o espírito fica longe: palavras que não se deixam prender e, enfim, o recado é para já.

Tem-se dito e escrito tanto sobre esse “Caso Battisti” que já não sei mais distinguir direitinho o eu do outro. Aquele Battisti surgido do nada e jogado pela mídia como pasto para gado. Mas essas são só palavras, vazias como as cabeças desses mercenários que costumam facilmente trocar a pistola com a caneta e até uma cadeira no Congresso. No entanto, os companheiros/as de luta, assim, todos/as aqueles que ainda sabem ler atrás da “notícia”, vocês sabem quem é quem, qual a minha história e também a manipulação descarada que está servido a interesses políticos e pessoais, de carreira e de mercado: em 2004, depois de 14 anos de asilo, a França de Sarkozi me vendeu à Itália de Berlusconi em troca do trem-bala [comboio de grande velocidade] de Lyon-Turin. Desde o ano 2000 estamos assistindo à impiedosa tentativa do estado italiano enterrar definitivamente a tragédia dos anos de chumbo, jogando na prisão e levando à morte o bode expiatório Cesare Batisti.

Entre centenas de refugiados dos anos 70 que se encontram em vários países do mundo, não fui escolhido eu por acaso nem pela importância do papel de militante, mas pela imagem pública que eu tinha enquanto escritor, o que me dava o acesso à grande mídia para denunciar os crimes de Estado naquela época e os atuais…

Eis que de repente há tantas coisas por dizer que eu não sei mais me orientar! Pela rua, claro, só a rua vai me dirigir até vocês. Na rua comecei mil anos atrás e nela continuo; nela mesmo onde será praticamente impossível evitar-nos. E então falo, falo de homens e de mulheres, de companheiros(as), de sonhos e de Estados (esses também ficam no caminho, de ladinho). Falo sobre minha vida que não conheceu hinos, nem infância, mas que em troco tive o mundo todo para brincar com outra música que não essas fanfarras de botas.

Contudo, parece quase que que estou falando como homem livre, não é? Porém, estou preso. Vai fazer quatro anos no próximo março. Ainda assim, essas cariátides da reação não conseguiram me pegar em tempo. Quase três anos se passaram (antes de eu ser preso), de rua a outra, nesse tempo conheci o país, cheirei o povo, me misturei a ele, ao ponto de quase esquecer o hálito fedorento dos cães de caça. Ainda estou preso, está certo, mas isso não me impede de sentir lá fora vossos corações batendo pela liberdade.

Talvez eu tinha que falar-lhes algo mais sobre esta perseguição sem fim, dar-lhes algumas dicas de como driblar a matilha. Mas acabei por pintar-lhes um abraço sincero e libertário. É o que conta.

Cesare Battisti, 18 de janeiro de 2011

---

CesareLivre!

Uma carta de Cesare Battisti

Uma carta de Cesare Battisti: A história não se julga nos tribunais, ela será sempre

Caros companheiros(as), há meia hora, nesta terça, antes da visita dos companheiros decidi escrever um recado para todos vocês que participam dessa luta em meu favor. Resultado: pouco tempo para escrever algo vigoroso; cabeça cheia de insultos grifados de uma cela a outra; e o espírito fica longe: palavras que não se deixam prender e, enfim, o recado é para já.

Tem-se dito e escrito tanto sobre esse “Caso Battisti” que já não sei mais distinguir direitinho o eu do outro. Aquele Battisti surgido do nada e jogado pela mídia como pasto para gado. Mas essas são só palavras, vazias como as cabeças desses mercenários que costumam facilmente trocar a pistola com a caneta e até uma cadeira no Congresso. No entanto, os companheiros/as de luta, assim, todos/as aqueles que ainda sabem ler atrás da “notícia”, vocês sabem quem é quem, qual a minha história e também a manipulação descarada que está servido a interesses políticos e pessoais, de carreira e de mercado: em 2004, depois de 14 anos de asilo, a França de Sarkozi me vendeu à Itália de Berlusconi em troca do trem-bala [comboio de grande velocidade] de Lyon-Turin. Desde o ano 2000 estamos assistindo à impiedosa tentativa do estado italiano enterrar definitivamente a tragédia dos anos de chumbo, jogando na prisão e levando à morte o bode expiatório Cesare Batisti.

Entre centenas de refugiados dos anos 70 que se encontram em vários países do mundo, não fui escolhido eu por acaso nem pela importância do papel de militante, mas pela imagem pública que eu tinha enquanto escritor, o que me dava o acesso à grande mídia para denunciar os crimes de Estado naquela época e os atuais…

Eis que de repente há tantas coisas por dizer que eu não sei mais me orientar! Pela rua, claro, só a rua vai me dirigir até vocês. Na rua comecei mil anos atrás e nela continuo; nela mesmo onde será praticamente impossível evitar-nos. E então falo, falo de homens e de mulheres, de companheiros(as), de sonhos e de Estados (esses também ficam no caminho, de ladinho). Falo sobre minha vida que não conheceu hinos, nem infância, mas que em troco tive o mundo todo para brincar com outra música que não essas fanfarras de botas.

Contudo, parece quase que que estou falando como homem livre, não é? Porém, estou preso. Vai fazer quatro anos no próximo março. Ainda assim, essas cariátides da reação não conseguiram me pegar em tempo. Quase três anos se passaram (antes de eu ser preso), de rua a outra, nesse tempo conheci o país, cheirei o povo, me misturei a ele, ao ponto de quase esquecer o hálito fedorento dos cães de caça. Ainda estou preso, está certo, mas isso não me impede de sentir lá fora vossos corações batendo pela liberdade.

Talvez eu tinha que falar-lhes algo mais sobre esta perseguição sem fim, dar-lhes algumas dicas de como driblar a matilha. Mas acabei por pintar-lhes um abraço sincero e libertário. É o que conta.

Cesare Battisti, 18 de janeiro de 2011

domingo, 16 de janeiro de 2011

Livros de apoiadores de Cesare Battisti proibidos nas Bibliotecas de Veneza

Estamos reproduzindo aqui a notícia veiculada pelo Comitê de Solidariedade a Cesare Batistti, cesarelivre.org. Cesare Livre!

Livros de apoiadores de Cesare Battisti proibidos nas Bibliotecas de Veneza


Uma circular enviada por Raffaele Speranzon, assessor de cultura de Veneza, e do partido de Berlusconi, manda retirar das estantes das bibliotecas de Veneza os livros de todos os autores que em 2004 firmaram uma carta pela liberdade de Cesare Battisti. Os blibliotecários que não obedecerem serão responsabilizados, diz a circular.

Entre os autores banidos mais conhecidos do público brasileiro está, por exemplo, o filósofo Giorgio Agamben.

Também na lista de banidos se encontra, entre muitos outros:

Valerio Evangelisti, Wu Ming, Massimo Carlotto, Tiziano Scarpa, Nanni Balestrini, Daniel Pennac, Giuseppe Genna, Girolamo De Michele, Vauro, Lello Voce, Pino Cacucci, Christian Raimo, Sandrone Dazieri, Loredana Lipperini, Marco Philopat, Gianfranco Manfredi, Laura Grimaldi, Antonio Moresco, Carla Benedetti, Stefano Tassinari.

Receia-se que tal política se estenda para a região e para além dela, se nada for feito.

Por que será que a grande mídia não noticia este fato? Será se é porque não pega bem mostrar a face fascista dos que querem Battisti extraditado, do governo Berlusconi e do "Estado Democrático de Direito" italiano?

E ainda há os que dizem, contra todos os fatos, que não há nada que mostre que Battisti seria perseguido político. Se os apoiadores dele já o são, imaginem ele.

Link com a notícia: http://ilgazzettino.it/articolo.php?id=134755&sez=NORDEST

Sobre o fato, por Wu Ming, coletivo de autores banido: http://www.wumingfoundation.com/giap/?p=2572